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‘Saving Lisa’, la adaptación francesa de la japonesa ‘Mother’ llega a COSMO

'Saving Lisa' es la adaptación de la ficción japonesa 'Mother'

Hacia 2010 se estrenaba en Japón una serie llamada Mother, cuyo éxito internacional la han llevado a ser adaptada en varios países. Entre ellos Corea del Sur y sobre todo Turquía, que es la que ha triunfado en España. Madre (Anne) va a dar lugar a un remake español protagonizado por Adriana Ugarte y que se llamará Heridas. Pero la versión que nos ocupa es la francesa, que se estrena esta noche en COSMO a las 22:00h y se llama Saving Lisa. 

Como las anteriores, la serie nos cuenta la historia de una maestra sustituta que se fija en una niña que tiene problemas visibles pero con la que conecta al instante. Tras recurrir sin éxito a la dirección del centro y a servicios sociales, decide secuestrar a la niña para apartarla del ambiente tóxico que vive en casa. Despreciada y semi abandonada por su madre, y víctima de abusos por parte de su padrastro, Lisa ve como buenos ojos huir con Rose y ser su hija desde ese momento. La mala fortuna lleva a ambas a casa de la familia de Rose, donde conoceremos más episodios de su vida y un trauma que arrastra desde hace años. Saving Lisa, cuyo título original es Sauver Lisa, cuenta con Caroline Anglade y Capucine Sainson-Fabresse como protagonistas, y en ella encontramos la participación de la española Victoria Abril.

La actriz española sobresale con su interpretación en 'Saving Lisa'

En Saving Lisa nos encontramos con una historia sobre la maternidad, el abandono, los traumas infantiles, el amor y las malas decisiones. Todos estos temas podrían haber sido abordados desde diversas perspectivas, dulcificando la decisión de Rose e intentando ponernos de su lado descaradamente. Sin embargo, nos situamos un poco al margen de la acción a pesar de la injusticia que está sufriendo Lisa pero también comprendiendo que el rapto de la niña no es la mejor de las soluciones. Rose lo hace por un motivo oculto de su pasado, por necesidad verdadera de salvar a la niña y por su deseo de ser madre. La propuesta de la serie nos acerca más al thriller que a una serie de corte social, que es lo que yo esperaba, más cercana a La infamia o a Que viene el lobo. Al menos en sus dos primeros episodios se aleja de la crítica social, no denuncia los errores del sistema. En cambio, consigue alternar el drama con pequeños espacios para la comedia, o mejor dicho, momentos tiernos tirando al melodrama.

Interesante propuesta la que nos trae COSMO que, sin ser una serie que nos marque de por vida, sí es entretenida y nos cuenta una historia que nos haga reflexionar sobre temas muy importantes que están sobre la mesa en nuestro día a día. Tomarse la justicia por su mano puede ser una muy mala decisión, pero la ausencia de decisiones puede acabar con la infancia de una persona y destruirla de por vida. El sistema falla al igual que fallamos los seres humanos, y Saving Lisa, Madre Heridas nos lo van a contar en todos los idiomas.

Saving Lisa se estrena este jueves 27 de enero a las 22:00h en COSMO, y todos los jueves, un nuevo episodio hasta completar los seis que la componen.

 

’22 de julio’: errores humanos en el mejor país del mundo

'22 de julio' nos cuenta desde varios puntos de vista los atentados de Oslo y Utoya en 2011

«Noruega es el mejor país del mundo»

Con esta frase que puede parecer pretenciosa, y lo es, comienza 22 de julio. Que Noruega sea el mejor país del mundo o no realmente no importa tanto en el desarrollo de esta miniserie que analiza a una sociedad que no sabe reaccionar ante un atentado, una masacre de semejantes características. Es posible que ningún país esté preparado todas las mañanas para algo así, pero las expectativas pueden estar muy altas con el denominado «mejor país del mundo», ¿no creéis? Con este enfoque, Sara Johnsen y Pål Sletaune someten a Noruega a un examen a posteriori sobre los errores puntuales y como sociedad se pueden haber dado para que se respondiera de la forma en que se hizo, sino cómo se pudo crear un caldo de cultivo para que este asesino llegara a actuar.

Como decimos, 22 de julio nos cuenta la historia previa, durante y después de los atentados de Oslo y Utoya de 2011, que le costó la vida a 77 personas, perpetrado por el ultraderechista Anders Behring Breivik. Y lo hace tomando como testigos a varios personajes (inventados para la causa, como nos recuerdan en cada inicio de episodio), que representan a cada uno de los colectivos elegidos para hacer esa radiografía de la sociedad noruega. El periodismo, la educación, el servicio de urgencias de un hospital, la policía, un bloguero de extrema derecha y unas pinceladas de esa sociedad inmigrante tan denostada por estos grupos de fanáticos, son los colectivos elegidos para que sirvan de motor de la historia.

Como en todas las sociedades modernas, el problema de los recortes de gastos y esa creencia engañosa de que los servicios públicos deben ser rentables, también se deja notar en Noruega. La primera historia que me gustaría resaltar es la de la doctora Helga, que ve amenazado su puesto de trabajo y la planta de urgencias del hospital por motivos exclusivamente económicos. Las constantes visitas de los consultores y la falta de medios tienen a este servicio al borde del colapso, más aún con lo que está por llegar con el atentado. Su lucha, tanto profesional como personal es una de las tramas más conmovedoras, aunque no exenta de fallos, como ya veremos.

'22 de julio', la miniserie sobre los atentados de Oslo y Utoya de 2011. Disponible en Filmin

Asímismo, la historia del policía Eivind retrata los fallos de la policía, no sólo en lo referente a los atentados, sino también en cuanto a la ayuda de los necesitados como es el caso del niño que se cae por el balcón. Y vemos que el error no es sólo de este hombre sino que se trata de una cadena de errores propiciados por el propio sistema y sus imperfecciones. Otro de los retratos más significativos de 22 de julio es el trato exquisito que dan a la educación, que vemos que se resiente cuando un niño necesita más ayuda de lo normal, aunque también evidencia que los países nórdicos nos llevan una vida de adelanto en este asunto, sobre todo.

Quizás el acercamiento que más me ha gustado de la serie ha sido el del periodismo, porque primero es que el catalizador que mueve la historia. Anine y su compañero Harald representan el papel de la profesión en esos días tan complicados. Nos enseña lo difícil que es trabajar bajo toda esa presión y la necesidad de que, en un suceso de tal magnitud, los medios tienen que servir de ayuda al mismo tiempo que se necesita que sea incómoda en su afán de buscar la verdad. A ellos les toca investigar el perfil del terrorista, buscar esos fallos del sistema en la policía y el ejército en el caso de que los hubiera y también homenajear a las víctimas.

22 de julio es muy dura, tiene momentos en lo que las lágrimas está a punto de salir, otros de pura indignación, pero al mismo tiempo hay que reconocer el mérito que tienen sus creadores al no recrearse en escenas violentas. Pero el trabajo tan meticuloso que hacen con los personajes consigue que empaticemos como si hubiéramos estado en la zona cero del desastre. Todo está contado con agilidad, sin tramas insustanciales, al estilo que los noruegos nos están acostumbrando últimamente como es el caso de Home Ground, Nobel Caza de brujas

El papel del periodismo es muy importante en '22 de julio'

22 de julio es una de esas joyitas del catálogo de Filmin que nadie debería perderse, más que por diversión, diría que por aprender. Aprender de las barbaridades hasta las que los extremismos son capaces de llegar, a conocer a una sociedad que no estamos acostumbrados a ver en pantalla. Y aprender también a contar historias tan vastas como esta, que podría tener ramificaciones casi infinitas, en tan sólo seis episodios. Muy recomendable esta miniserie, no os la perdáis, por favor.

‘Equinox’: ciclos naturales, ritos y desapariciones

'Equinox', la nueva serie danesa de misterio de Netflix

El misterio, aquella sensación que nos eriza y nos alerta, forma parte de aquellos miedos que construyen muros con la finalidad de dejar atrás el pasado, antiguas experiencias y cuentos repetidos. Canciones de cuna de melodías macabras, o acontecimientos que marcaron parte de nuestra vida, rememorando siluetas bailando en el tragaluz o la ventana de la habitación, antes de dormir atrapados por el sonido del viento, crispado sobre las copas de los árboles legendarios. Equinox, es una probada de lo anterior. Eventos grabados en la memoria, rupturas familiares y entidades fantásticas que se niegan a desaparecer. Dentro del catálogo de Netflix, desde las lejanas tierras  danesas, con un estilo folk horror y un aire de Stephen King, un grupo de adolescentes ochenteros, sin saberlo, irán rumbo a la tragedia. 

Ida (Karoline Hann) de manera inexplicable, desaparece junto a  un grupo de compañeros de colegio durante un viaje en autobús. Tres de ellos  regresarán: Amelia (Fanny  Leander  Bornedal), Jakob (August Carter) y Falke (Ask Mossberg Truelsen). Interrogados por la policía, contarán sólo partes inconexas de la verdad, dejando el rompecabezas inconcluso sobre la mesa. Así, el tiempo pasará en un aparente silencio, hasta que los antiguos fantasmas del pasado, regresen por  Astrid (Danica Curcic) en forma de  extrañas visiones y paranoias, las mismas que marcaron su complicada infancia. Un confuso universo, siniestro y caótico, aparece recurrente y violento en sus sueños. En ellos, Ida, su hermana, aún se encuentra cautiva, luego de años de oscuridad. Los padres de las niñas, Dennis (Lars Brygmann) y Lene (Hanne Hedelund) sufrirán las consecuencias de lo sucedido con sus hijas, cada uno con sus propias maneras de afrontar la tragedia. De este modo, serán influyentes en la personalidad y la vida adulta de Astrid, asolada constantemente por la  angustia. Luego de recibir una extraña llamada telefónica al programa radial que conduce, comenzará una ardua búsqueda e investigación, intentando desentrañar aquel mítico acertijo del pasado. En aquella tarea, conocerá a Henrik (Alexandre Villaume) uno de los profesores de los chicos perdidos, el cual jugará un papel determinante hacia final de este teatro de secretos.

La serie no somete al espectador con sorprendentes efectos o giros imposibles. Logra prevalecer con un paso cauteloso, dejando rastros e insinuaciones una y otra vez a lo largo de la aventura. Equinox establece un universo fantástico y primordial, cuyo génesis encontramos en la leyenda de Ostara, diosa femenina quien se enamora perdidamente de un ser maravilloso y extraño. Aquí, la narración jugará con algunos elementos típicos del crime story y el horror psicológico pero, sobre todo, similar a una fábula, un relato rural que relaciona a los seres humanos con dioses arquetípicos, los mismos que ofrecen y piden favores a cambio, arraigados en el acerbo cultural de la comunidad.

El relato, se compone de  dos historias relacionadas con la protagonista, utilizando una permanente irrupción del pasado en el presente, al igual que una caja de muñecas infinita en donde las habitaciones ocultan espejos y cajones. De este modo, a través de constantes flashbacks y recuerdos, la heroína luchará por encontrar la verdad, aquella que parece haber sido olvidada. Con sus tonos opacos, un tanto grises y duros, la atmósfera simulará un onírico anti paraíso, en donde los personajes parecen afectados por la locura o una especie de amnesia, lo que los mantiene protegidos de aquel agujero dimensional en donde yacen cautivos los actos del pasado.

'Equinox', la serie danesa de Netflix, se adentra en un mundo de ritos ancestrales

Sin ser demasiado inteligente, tiene buenos momentos, a pesar de sus múltiples preguntas sin respuesta. En aquel apartado se desequilibra y cojea, prisionera de un guion que deja constantes interrogantes. Mientras, a ratos es un poco burda al revelar la conclusión de la historia, de manera premeditada o no, por otro lado, deja abiertas las puertas, cabos sin atar y puntos suspensivos de paréntesis vacíos. Sin embargo, funciona en su mitología y genera curiosidad. 

Equinox, es un buen ejercicio sobre el género fantástico, con deidades antropomorfas y una liturgia legendaria, que da cuenta de un teriomorfismo vivo en la comunidad, cuyo objetivo es mantener el equilibrio de la naturaleza, en un ciclo infinito. Con aspectos sectarios, místicos y ritos que aluden a la fertilidad, es una ventana hacia los sueños, la conciencia y la manera en que la niñez determina la personalidad de los individuos, su psicología y los límites entre la realidad y la imaginación. Aquel mundo que construimos luego de traumas profundos y heridas emocionales. Bien actuada y correcta, puede ser adictiva y un buen plato de ficción para aquellos que gustan del género de lo inexplicable. 

Ida y Astrid son dos hermanas separadas por una tragedia en 'Equinox'

Mientras tanto, en medio de nuestra propia jungla confortable, hecha de vanidades y modernidad, más de alguno soñará con seres imposibles, animales de rostros y ojos humanos al oír uno que otro cuento escuchado junto al fuego luego de largos inviernos. Es la maravilla de los hombres: soñar e imaginar. Hasta donde sea posible. 

Equinox está disponible en Netflix completa bajo demanda.

‘Romulus’: El origen del héroe bajo la espada de la traición

 

'Romulus', la serie prerromana de HBO

Cuando la ambición comienza a carcomer el seso de la gente, no es posible regresar. No existen los hermanos, padres, madres, amigos o familiares. Es el principio de la barbarie y la caída de la moralidad. En este juego de poderes, que pretende ser conspiranoico y salvaje, Romulus es una lucha hacia la madurez, el destino y la aceptación.

La historia, nos sumerge en los orígenes del magno Imperio Romano, siglo VIII antes de Cristo, en una época tribal en donde diversos grupos están regidos por reyes, de los cuales el rey de Alba, Numitor (Yorgo Voyagis) es quien lleva la batuta siendo la cabeza de todos ellos. Éste será desterrado luego de que los dioses abandonen a los hombres, asolados por una prolongada sequía. Aquí, las oscuras intenciones de Amulius (Sergio Romano) comenzarán a manifestarse siendo estimulado por su codiciosa mujer, Gala (Ivana Lotito). El maquiavélico plan de ambos teñirá los campos de sangre y de muerte. Buscarán asesinar a los legítimos herederos del trono, Enitos (Giovanni Buselli) y Lemos (Andrea Arcangeli). Este último, conseguirá escapar y refugiarse en el bosque  donde conocerá a Wiros  (Francesco de Napoli), un ex esclavo con quien entablará una profunda relación de hermandad. Juntos, vivirán una aventura de supervivencia que terminará con los protagonistas siendo parte del temido culto de la diosa Rumia, cuyos súbditos y adoradores viven ocultos en cuevas y rindiendo tributo a la deidad pagana. Por otro lado, Ilia (Marianna Fontana), hija del traidor y antagonista del relato, abandonará el servicio de las vestales, luego de cometer una afrenta imperdonable. Tras esto, será enterrada en una oscura caverna, pretendiendo escapar sin conseguirlo. Ya en la agonía, será rescatada gracias a la obra del Dios Marte, quedando consagrada a su servicio y transformándose en guerrera. Una vez establecido el conflicto, dos bandos chocarán en una fiera persecución, unos en busca de mantener el  poder y otros sedientos de venganza y justicia. 

'Romulus' recompone el mito de Rómulo y Remo en la nueva serie de HBO

Romulus, sigue la tradición de las  épicas de origen, la narración de aventuras y el nacimiento del héroe, aludiendo a la tragedia griega y al destino del hombre en manos de los dioses. En ella, tenemos una reinterpretación del mito original, en donde dos niños son alimentados por una loba, en el amanecer del imperio. Hay elementos realistas, que buscan cierta historicidad, pero siempre en relación a una mítica atmósfera que logra conseguir un aspecto sucio y agreste, que corresponde perfectamente al modo de vida de antaño. Es rudimentaria en su estética, brutal y primitiva. Completamente hablada en latín, lengua madre de la antigüedad , aquella curiosa estrategia, consigue acentuar la visión de aquel mundo, una sociedad diferente, ajena a la nuestra. Es violenta y pasional, sin embargo, su ritmo pausado al inicio, tiene un  par de capítulos que podrían asustar. Hay lapsos en donde decae, para luego acelerar con poco diálogo y elementos convenientes para el guion. Aquello, le resulta efectivo, inyectando energía y  más equilibrio al entramado. De este modo, genera expectativa, sin la necesidad de adormilar al cómodo espectador con marañas filosóficas o elaboradas conspiraciones. 

Llena de personajes que han sido criados bajo la agreste visión de un mundo explosivo, áspero y peligroso, es un cuadro potente sobre las raíces de la civilización.  Noches de tiniebla, en donde los animales acechan, el peligro es invisible y la vida es efímera, como un corazón acelerado, en alerta permanente. En este crisol primigenio, la traición y las ambiciones humanas, afloran y se desatan en busca de poder, siguiendo las leyes de la estirpe y el linaje. Es entonces cuando el héroe, primogénito de la tragedia, deberá aceptar su destino, huyendo de la muerte para poder renacer. Será más fuerte y más justo con el fin de brindarles un nuevo hogar a los suyos. Será un esclavo en cautiverio, pasará hambre y humillaciones.  Y tendrá que asesinar siendo parte de un clan que le brindará confianza y hermandad. Abrazará las creencias de los  relegados como si fuesen las suyas, haciendo lo necesario para sobrevivir y vencer. 

Imagen de 'Romulus', disponible completa en HBO España

Al amparo de estas observaciones, hay que acotar que Romulus, a pesar de su rudeza, no es sólo una aventura brutal y despiadada. No es una amalgama sangrienta como pudiera esperarse, sino que matiza estos elementos con un abanico de tramas que exponen las emociones y debilidades humanas, sus fortalezas y culpas. Se vale de su naturaleza, salvaje y sudorosa, para entregar un mensaje sobre la hermandad y los lazos que nacen de la desgracia, la miseria y el abandono. Es, a la vez, una metáfora visceral que nos ilustra, una  fábula mitológica sobre la servidumbre de los pueblos bajo el dominio de dioses belicosos, imperfectos y castigadores, en una sociedad que se rige por sus caprichos y deseos. La mítica presencia de estos seres celestiales, marcará el destino de los hombres. En esta  encrucijada, el joven destinado a ser rey y gobernar, pasará por encima de aquellas creencias para abrazar otro dogma, un dogma que personifica la semilla de un imperio tan poderoso como el sol.

Testigos de los albores de un magnífico pasado, quedarán cortes y heridas grabadas en la piel. Sangre y suciedad. Miedo y valor. Tras la  reconstrucción fidedigna de aquella escenografía, algún vuelco inesperado, podría inyectar más acción al argumento. Sin embargo, la maqueta realista de la época, con su fotografía grisácea, sus atuendos y rostros curtidos por la desesperación, bastan para gustar. Romulus funciona sin fuegos artificiales, en sus idas y venidas. Hubiera deseado más cosas, para convertirla en una épica legendaria y visceral. Pero, aún queda conflicto. Ojalá con más trampas, atrevimiento y sorpresas. 

Romulus está disponible completa bajo demanda en HBO

‘Roadkill’: entre la política y la melancolía

 

'Roadkill', la nueva miniserie de Hugh Laurie para BBC que emite en España Movistar+

Luego de protagonizar Avenue 5, para HBO, Hugh Laurie regresa a la pantalla con Roadkill, una breve serie de cuatro capítulos, en donde el carismático actor de la ya mítica House, interpreta al político británico Peter Laurence, un hombre cuya vida oscila entre los quehaceres gubernamentales y las trampas, turbias negociaciones y dineros conseguidos por cuestionados favores nada correctos para un respetado ministro, sea de donde sea. En esta ensalada de situaciones, su intimidad dista mucho de  ser ideal,  con  una esposa, Helen (Saskia Revees, Wolf Hall) que vive en un limbo de conformidad, y dos hijas lejanas, Lily (Millie Brady, Teen Spirit) y Susan (Ophelia Lovibond, Elementary) cuyo afecto obtiene sólo a migajas. Este pulcro caballero se verá enfrentado a un juicio del cual deberá salir con la bandera de la impunidad entre las manos, teniendo el favor de una ciudadanía que cree en su integridad, pero que comenzará a dudar de sus valores en este tira y afloja de eventos. Aquí, entrará en escena la periodista Charmian Pepper  (Sarah Greene, Dublin Murders) quien buscará alinearse con Rochelle Madeley (Pippa Bennett-Warner, Gangs of London) buscando pistas sobre turbios aspectos de la carrera del político. Este deberá zafarse del entuerto, para luego enfrentarse con la Primera Ministra del país, Dawn Ellison (Hellen Mc Crory, The Queen) quien lo pondrá a prueba tras asignarle un nuevo puesto, totalmente inesperado y que le obligará a modificar sus planes y proyectos. 

La serie se toma su tiempo desde el capítulo uno, constando con un buen número de personajes que formarán parte de las subtramas, unas más relevantes que otras, conformando un  rompecabezas de bordes un tanto romos, en donde las piezas necesitan una pausa para encajar. El primer giro importante de Roadkill, llegará desde los cuartos y rejas de una prisión estatal, lugar en donde se encuentra prisionera por fraude la joven Rose Dietl (Shalom Brune-Franklin). La reclusa, luego de conocer la identidad de su padre biológico, buscará la manera de contactarse con él, generando una serie de efectos y nuevos arcos que acabarán por estallar en una inteligente movida, hacia el final de la temporada. 

Roadkill es una serie clásica en donde el estilo va de la mano con un guion elaborado, que se sustenta en la intriga y la exploración de los personajes en un acto coral, donde la virtud es como un arbusto pisoteado por la bota de la arrogancia. El poder y las ambiciones conforman un universo de verdades y mentiras, en donde se vive y respira en un permanente estado de vigilia, en una niebla que confunde y embriaga a la vez. En este ambiente, se balancean códigos e introspecciones, valores tambaleantes sobre la familia, el matrimonio y las relaciones con los hijos, uniones fraternales que se convierten muchas veces en instrumentos, o en meras formalidades en esta selva política que rodea al protagonista. Aquello es como un perfume que cautiva y descoloca en una misma probada. Un nido enmarañado de amantes, de convenientes delitos, de cobardes por elección, individualidades que contrastan con idealistas incomprendidos que no temen a  la verdad, renunciando a la seguridad, el confort y el conformismo. Es una sopa multiforme de fecundos títeres y titiriteros, cada quien con una llave en la  cerradura del guion.

Hugh Laurie encabeza 'Roadkill', miniserie original de BBC que emite Movistar+

Aquello no siempre resulta y puede resultar redundante. No aburrido, pero lento, como los pasos del perezoso. Falta carbón en la fogata y a veces las cenizas están prontas a extinguirse. Sin embargo, cuando logra picar en la vena correcta, consigue drenar interés, con deliciosa y brumosa melancolía. 

La historia de Roadkill logra un retrato acertado de la alta clase política, con sus animales y pieles de oveja, yaciendo sobre lomos de viejos lobos al acecho. Cada uno de los invitados va por su propio trozo de pastel. Algunos por necesidad, falta de amor o de vitalidad. Otros, por mera competencia o compensación. Son caballos en la meta, que levantarán el polvo necesario para conseguir la diadema de flores en el podio. Es cínica e incorrecta. A ratos, da balidos en falso que desvían la atención, para regresar luego al corral, con brotes de genialidad. No es un thriller crispante. Ni un melodrama social. Está en el medio del camino. Con un fino humor negro, diálogos mordaces y una nube de soledad, brisa que sustenta una atmósfera otoñal de colores sobrios y distinguidos. Nunca es honesta a cabalidad. Llena de momentos reflexivos que siempre levantan sospecha, pondrá en jaque la honestidad que pretende exponer, siempre al borde de dudas, burdos engaños o trampas, situación que nos  dejará entre dos aguas e interrogantes. 

Peter Laurence se enfrenta a la fiscal y a una periodista en 'Roadkill'

Peter, es un antihéroe limítrofe, que recibe balas y las dispara, admirado y cuestionado en su impecable traje oscuro, lleno de defectos, sobriedad a toda prueba, y presa de la ambición. No intenta salvarse ni salvar sus relaciones. Las acepta por lo que son: piezas necesarias que son parte de su motor, de su construcción personal y de su oficio. Con esta fachada, la serie nos plantea las imperfecciones de la moral, sin caer en dramatismos, siendo afilada como las puntas de una mesa fabricada para ser el centro de atención, en una reunión de altos mandos. Lo impropio y lo cuestionable, no se esparce con torpeza. Es meticuloso. Porque el juego está en aquello. Aprovecharse de la manipulación, el poder y las debilidades que todos arrastramos, no con obviedades cliché, sino con rostros seductores, promesas y sonrisas. No será un crisol de novedades narrativas. Es cierto. Sus recursos, son predecibles y reconocidos. Sin embargo, funciona. Basta un poco de paciencia para llegar al huerto de frutos, en donde te recompensan unas jugosas y sólidas actuaciones, de aquellas que no defraudan. 

Roadkill no ganará el cielo ni la santificación, al igual que su protagonista. Sin embargo, deja abierta la brecha para la evolución de su ecosistema. Y si te lo tomas con calma,  disfrutarás de esta figura que cojea de pronto, pero que sigue adelante con un bonito bastón. Creo que vale la pena otra buena taza de té acompañada de la cautivante personalidad del político. Esperemos que regrese, mucho más punzante y curtida, directo al populismo televisivo. 

‘Back to Life’: de vuelta a la «normalidad»

'Back to Life' comparte productores con 'Fleabag' y ahora llega a Cosmo

En este último mes, el canal Cosmo nos ha traído grandes producciones con unas excelentes críticas tanto de público como de prensa. Primero estrenaron la mítica Fleabag y ahora nos acerca una serie de los mismos productores. Se trata de Back to Life, una maravillosa dramedia que fue estrenada en España por Filmin pero ahora podrá verla un público más amplio, ya que en este canal tendrá mucha mas difusión.

Esta serie, que hasta el momento consta de una temporada de seis capítulos de una media hora de duración, nos narra la historia de Miri, recién llegada a su pueblo después de haber pasado dieciocho años en la cárcel. Miri ronda la cuarentena y sin trabajo no puede hacer otra cosa que volver a casa de sus padres en un pueblo pequeño, en el cual todos juzgan y creen conocer los hechos que llevaron a nuestra maravillosa protagonista a dar con sus huesos en la cárcel. Todo esto le hace muy difícil reinsertarse en la sociedad, además la relación de sus padres no pasa por su mejor momento y la llegada de la protagonista no va a facilitar las cosas entre ellos .

El peso de Back to Life lo lleva Miri, interpretada de forma excepcional por Daisy Haggard, a la cual pudimos ver en Breeders (Bendita paciencia), una de las mejores comedias de este año. Pero Miri no está sola, el resto de personajes: familia y habitantes del pueblo también tienen sus propias historias que te hacen reír. Pero también indignarte, al ir descubriendo en cada capítulo los detalles del crimen por el cual el resto de la población la juzga sin importarles realmente el dolor que provoca o si realmente son ciertos los cotilleos que van soltando. Por si esto no fuera poco se le suman los intentos fallidos de volver con su amor de juventud, lo que lleva a Miri a una continua frustración.

'Back to Life' tiene una protagonista clara, Daisy Haggard, la protagonista de 'Bendita paciencia'

Esta serie nos habla de la reinserción y de las segundas oportunidades, con un tono muy irónico que bebe directamente de Fleabag, pero no esperéis una serie calcada a la de Phoebe Waller-Bridge, ya que tiene un toque más dramático. En mi opinión es una mezcla de Fleabag por su visión irónica, After Life, por ese tono más dramático y The Victim. Ésta última más desconocida, que nos hizo reflexionar sobre las segundas oportunidades y sobre cómo la opinión popular puede destruir la vida de una persona.

Aclamada por la crítica británica, Back to Life, esta serie es original de BBC3, te hace pensar y reír de una forma inteligente. Me congratula que un canal como Cosmo apueste por su emisión, ya que es una gran serie muy desconocida llena de historias personales que hará las delicias de los amantes de esas dramedias que tanto proliferan ahora . Además está renovada para la segunda temporada.

Back to life se estrena hoy jueves 22 de octubre a las 22:00h en COSMO. 

‘El tercer día’, un verano con paranoia y confusión

Jude Law protagoniza 'Verano', los tres primeros episodios de 'El tercer día'

El Tercer Día es la esperada miniserie del creador de la reconocida y particular ficción británica Utopía, Dennis Kelly. Esta vez, nos sitúa en la enigmática Isla de Osea, un paraje rural y perdido en el cual transcurren diversos eventos divididos en capítulos. El primero, Verano, tiene como protagonista a Jude Law (The New Pope) en el personaje de Sam, un hombre atormentado por el pasado, que llega de manera aparentemente fortuita a esta especie de villa, luego de sorprender a la joven Epona (Freya Allan, The Witcher), en un bosque aledaño. Anclado y sin poder salir, decidirá quedarse y verse envuelto en el extraño modo de vida de sus habitantes, quienes se encuentran preparando una celebración folklórica y mística. 

Mr. Martin ( Paddy Considine, El Visitante) y Mrs. Martin (Emily Watson, Chernobyl), serán los anfitriones que acogerán a Sam, quien se hospedará en el bar dirigido por ambos. Allí, conocerá a Jess (Katherine Waterston, Animales Fantásticos), una mujer complicada por la custodia de sus hijas y las dificultades de un frustrado matrimonio.  

Podría decirse que la historia de El tercer día está centrada en la pérdida, el proceso que conlleva el duelo y la forma en que aplacamos aquel dolor, de manera consciente, o no. Un evento devastador, ha dejado profundas heridas en Sam, quien presa de ciertos momentos de poca claridad mental, caerá fácilmente en la red tejida por la gente de Osea, desconociendo su destino, el cual parece inevitable. 

El guion tiene la medida de un thriller psicológico, motivo que se evidencia en los traumas y conflictos de los personajes, así como en las creencias religiosas que profesan. Una polarización distorsionada del cristianismo, jugando con elementos que corresponden a tradiciones paganas, dioses y sacrificios, todo esto en pos de la riqueza y la buena fortuna de los habitantes de la isla. 

'El tercer día' es la nueva serie de Dennis Kelly, el creador de 'Utopía'

A partir de este núcleo, diversas subtramas reforzarán la idea de esta malsana teología; no obstante, aún siendo pertinentes, algunas son difusas o poco desarrolladas. Da la impresión de querer utilizar demasiados elementos para contarnos algo que podría haber funcionado de otra manera. Al final, los diálogos pueden parecer demasiado explicativos, a pesar de la abundante simbología que presenta la historia. En cuanto a los personajes, los que se llevan el peso son los protagonistas, sólidos y bien interpretados, a diferencia de los secundarios, muchos de ellos anodinos, individuos que son guiados sólo por los impulsos, o que simplemente no son relevantes en absoluto. Esto con la clara intención de mostrar cierta enajenación y locura en ellos, recurso que nos desvela la identidad distorsionada de los seres humanos que conviven en esta especie de secta. 

Es el deseo del creador, claro está, exponer estas fisuras y jugar con el tono de la realidad, dando vida a un remolino de confusión. Sin embargo, ciertas situaciones un tanto gratuitas, hacen que la historia se vuelva a ratos predecible.  Este efecto, es el resultado de una ficción que bebe de muchas otras, lo que hace difícil no compararla con obras similares. En un viaje a ratos alucinante, nos toparemos con un abanico de tonalidades, flashbacks y efectos de cámara, que serán parte de una atmósfera nebulosa, intensificando los momentos al son de un buen fondo musical y representaciones alegóricas que brotan permanentemente ( el bosque, el mar, los insectos, etc). Esto, sumado a la impecable performance de los actores más avezados, hacen que la serie consiga flotar, tapando la irregularidad de su guion, creando momentos de misterio y alcanzando algunos puntos de horror psicológico bastante logrados.

En resumen esta primera parte de El tercer día, Verano, siendo un tanto confusa y un poco obvia, logra imponer las condiciones necesarias para crear una trama interesante, instaurando la mitología del pueblo de Osea y sus particulares habitantes. Dolor, muerte, redención, perdón y olvido, yacen en esta bruma que se dispersa como el mar, dejando abierto el camino hacia la isla, un camino serpenteante que decides cruzar, o no. Allí, estarán esperando sus misterios, entre algunas sombras y pantanos, árboles, grillos anaranjados, claroscuros e imágenes oníricas al borde de la paranoia y la realidad.

‘Quiz’, la historia detrás de un fraude millonario

Charles Ingram (McFadyen) y Chris Tarrant (Sheen) en 'Quiz'

El concurso televisivo es un género propio dentro de las parrillas televisivas, de hecho, a lo largo de la historia muchos han sido líderes de audiencias. A día de hoy, en una televisión en decadencia, sigue siendo un producto rentable, actualmente tenemos muy buenos ejemplos en España y en el mundo. ¿Quién quiere ser millonario? ha sido uno de los más atractivos de los últimos años y ha inspirado ficciones como Slumdog Millionaire. Quiz, que se estrena hoy en Movistar+, es la recreación de cómo un matrimonio y su cómplice consiguieron hacer trampas para ganar ni más ni menos que un millón de libras.

Esta miniserie de 3 episodios de unos 45 minutos se emitirá el lunes 28, martes 29 y miércoles 30 de septiembre en Movistar+, en emisión simultánea a su canal original, ITV. Dichos episodios han sido dirigidos por el cineasta británico Stephen Frears, que se está especializando en miniseries, recordemos que también dirigió A Very English Scandal o la serie corta State of The Union. Delante de las cámaras tenemos actores de reconocida solvencia como Matthew Macfadyen (Succession), Sian Clifford (Fleabag), Mark Bonnar (Catastrophe) y un excepcional Michael Sheen, que consigue una imitación espectacular del presentador del programa Chris Tarrant.

Los Ingram consiguieron un millón de libras en 'Quién quiere ser millonario', leit motiv de 'Quiz'

Las tres partes o episodios de las que consta Quiz están muy bien diferenciadas. En la primera asistimos al nacimiento del formato, que para quien no lo sepa es original de ITV a través de la productora Celador, de Paul Smith. Este hombre consiguió vender un formato que se haría tan popular como para estar presente en 105 países. Al mismo tiempo, conocemos a los Ingram y su afición por los quiz shows. Diana y su hermano Adrian Pollock se obsesionan hasta el punto de presentarse varias veces para concursar. Ambos lo hacen, sin demasiado éxito, dejando el lugar a Charles, el menos interesado.

En el segundo episodio, Quiz nos cuenta la participación de Charles Ingram en Quién quiere ser millonario casi en exclusiva, en el que para mí es el mejor de los tres. Y creo que lo es porque el nivel de representación del programa real es asombroso. Si en el primero ya habíamos gozado con la interpretación de Michael Sheen, en el segundo se magnifica, pero también Matthew Macfadyen, que consigue mimetizar los gestos y la forma de hablar del verdadero Charles Ingram. De hecho, os dejo un vídeo que contiene la participación completa real del concursante.

El tercer episodio se centra en exclusiva en el juicio. Un episodio en el que la abogada defensora, interpretada por Sarah Woodward consigue sembrarnos la duda razonable sobre si de verdad hicieron trampas o no. Al mismo tiempo, vamos viendo las consecuencias que para la familia ha tenido el desgraciado suceso, que incluyen insultos, agresiones y risas en torno a las toses que supusieron el fraude. De hecho, en el mismo juicio hay una escena cargada de humor al respecto.

La miniserie contiene toda la calidad que se le presupone a la ficción británica. La ambientación de finales de los 90 y principios de los 2000 es impecable, mención especial para la recreación del plató, la ropa, etc. Pero donde más brilla Quiz es en la labor de sus actores y actrices, que consiguen una mímesis asombrosa con los personajes reales, apostando más por los gestos, acentos y forma de hablar que en el propio parecido físico. También destaca la dirección de Stephen Frears, un director muy clásico, muy sobrio, pero que consigue sacar detalles originales en sus obras, así como crear situaciones humorísticas en medio de todo el drama. Una mezcla de géneros que no llega a ser tan acusada como en A Very English Scandal, pero que también se nota.

Charles y Diana Ingram en 'Quiz', que se emite en Movistar+

En definitiva, Quiz es muy recomendable tanto para el que supiera al dedillo esta historia de fraude millonario, como para el que no haya oído hablar de ella, como era mi caso. Comprobar después en YouTube la historia verdadera es otro ejercicio que recomiendo como guinda a esta entretenida miniserie.

‘Caza de brujas’, la adictiva serie noruega sobre la corrupción

Caza de brujas (Heksejakt), se estrena en Filmin

La ficción noruega no para de darnos alegrías, una industria pequeña de un país pequeño consigue darnos un buen puñado de series más que aceptables, cuando no excelentes. En esta ocasión, y de la mano de Filmin otra vez, llega Caza de brujas, Heksejakt en su título original. La plataforma nos ofrece desde hoy los ocho episodios de 45 minutos que la componen. Y el tema, los delitos económicos dentro de un bufete de abogados y la consecuente guerra que se desata entre los que quieren sacar la verdad a la luz y los que intentan proteger su statu quo.

Ida Waage (Ingrid Bolsø Berdal) es la directora financiera de uno de los bufetes de abogados más importantes de Oslo. Un día encuentra sobre su mesa una extraña factura de una empresa holandesa que le llama la atención. Cuando descubre la verdad que se esconde tras el documento, decide llevar el asunto al sistema. Las consecuencias serán importantes, tanto para ella como para varias personas muy influyentes de las élites noruegas. Ida es una mujer que quiere hacer bien su trabajo y ser feliz, como ella misma menciona, pero su sentido del deber le lleva a una vorágine en la que no quería estar metida. Así, empieza a ser víctima de acoso laboral, de amenazas y se la tacha incluso de racista. La soledad de Ida encuentra consuelo en un agente de delitos económicos y una periodista.

Caza de brujas (Heksejakt), gira en torno a los delitos económicos de un bufete de abogados

La ficción noruega, a diferencia de otras, no tiene miedo de mirar a la cara a la corrupción o de denunciar las injusticias e imperfecciones del sistema. En Caza de brujas, hasta la Ministra de Justicia es un personaje y nos muestra la decencia de sus políticos en su forma de actuar. La paradoja es que mientras denuncian las corruptelas y ponen en tela de juicio su sistema, nos enseñan la cruda realidad de la política en otros países occidentales como puede ser España. Una vez más, los que salen peor parados son los tiburones empresariales cuyo único interés se enfoca en el dinero, como bien vimos en la también noruega Exit.

Una de las curiosidades más interesantes de Caza de brujas, es que está creada por dos mujeres, Anna Bache-Wiig y Siv Rajendram Eliassen, que fueron guionistas de la película Utoya. 22 de julio, así como otras ficciones televisivas noruegas como El tiempo de la felicidad. Ya hemos visto que está protagonizada por una mujer pero también hay mujeres en la dirección, Eva Sørhaug. Este punto es clave para ofrecernos un un punto de vista femenino a problemas que siempre han sido muy masculinos. Y si además de mujeres, son noruegas, mejor si cabe.

La serie tiene dos puntos muy fuertes. El primero de ellos es la simpleza, la limpieza narrativa que suelen exhibir los noruegos, sobre todo, ya que otros países nórdicos sí caen en esas narrativas tan farragosas importadas sobre todo de Estados Unidos. Menos es más, ellos ya lo comprendieron hace mucho tiempo. La historia de Caza de brujas lleva un camino muy simple pero efectivo, lo que consigue que el metraje no sea excesivo y las tramas no nos parezcan pesadas. La otra gran cualidad que resalto de la serie es su capacidad adictiva, pues consigue engancharnos muy rápidamente con un tema que al gran público puede no parecerle nada estimulante, pero el ritmo endiablado y la sucesión continua de acontecimientos hacen de que te olvides de que no tienes ni idea de lo que están hablando.

Pero nada más lejos de la realidad, los delitos económicos, los bufetes de abogados, las intrigas políticas y los juegos de poder en las altas esferas contienen elementos del mejor thriller. No hace falta la violencia para crear tensión en el espectador, basta con una buena historia y giros sorprendentes. Ya lo vimos en la alemana Bad Banks, en la reciente Follow The Money o en dos series norteamericanas que hacen muy bien esto, Billions y Succession. Y esta temática da para muchos giros. Pero Caza de brujas, a pesar de que podría volverse muy loca, consigue mantener la sobriedad y la seriedad de los nórdicos. Y sí, también frialdad.

Para terminar, simplemente recomendar Caza de brujas, por su ritmo, su capacidad de adicción, su simpleza y porque es entretenimiento a la vez que te hace plantearte la eterna pregunta de si los poderosos 22siempre ganan o se les puede derrotar a pesar del sistema.

Caza de brujas está disponible completa bajo demanda en Filmin

 

‘El colapso’: el fin del mundo, en plano secuencia

'El colapso' es la nueva serie de Filmin, creada por Les Parasites para Canal+ Francia

Hoy 14 de julio, llega a Filmin a modo completo la miniserie Francesa El Colapso o L’effondrement en su idioma original. Se trata de una pequeña gran serie apocalíptica que nos demuestra que no hace falta una catástrofe natural o un virus para que la sociedad tal y como la conocemos se vaya al traste y nos veamos indefensos. Tan real y actual que no podrás resistirte a verla en maratón.

Dirigida por Les Parasites, un colectivo formando por antiguos alumnos de a Escuela Internacional de Creación y Dirección Audiovisual, que se ha dedicado hacer cortometrajes y distribuirlos gratuitamente, con los que han ganado varios premios. Se le suma la producción de Canal + Francia. Está protagonizada por varias caras conocidas del cine y televisión francesa, como Lubna Azabal a la que ya habíamos podido ver en Nox y La chica del tambor, Thibault de Montalembert de Call my Agent o The Tunnel. También vemos a Bellamine Abdelmale, que lo habíamos visto en aquella serie de terror Marianne y próximamente le veremos también en Hippocrates, junto a más caras conocidas.

Imagen del episodio de 'El colapso', serie francesa que estrena Filmin

¿Qué pasaría con el planeta y con nuestra sociedad, si el sistema colapsara mañana? ¿Qué principios regirían la nueva normalidad: la solidaridad, la igualdad o la supervivencia? Con esta premisa, durante ocho episodios de unos frenéticos veinte minutos de duración, El colapso nos sumerge en cada historia casi en primera persona, ya que está rodada en un maravilloso plano secuencia, que te hace partícipe de la narración. Al principio de cada episodio nos sitúa en el tiempo, diciéndonos los días que han transcurrido desde el colapso. A partir de ahí, veremos como a nuestro alrededor, se van acabando los recursos básicos como la comida en los supermercados, o el racionamiento y especulación con el combustible. La serie también juega mucho con la controversia moral a la que se enfrentan los protagonistas, teniendo que elegir entre lo que les dicta su instinto de supervivencia y «su egoísmo», o lo que es éticamente correcto y seguir trabajando cuando dependen vidas de ello. Como en el episodio de la central nuclear o en el de la residencia de ancianos. Como no podía ser de otra manera, también veremos a la élite de la sociedad, intentando ponerse a salvo con todos los recursos a su alcance, pisoteando cualquier obstáculo en su camino, sin importarles lo que dejan atrás. Todo confluye en un episodio final, que al contrario de los demás, transcurre días antes, y que será el colofón de esta magnífica historia.

Lo mejor de El colapso es que al ser tan real y cercana te hace pensar en un futuro factible a corto plazo, bastante pesimista e inquietante para la humanidad. Las actitudes de los personajes nos hacen recordar en todo momento lo que hemos vividos estos últimos meses haciéndola todavía más aterradora. Esto, junto a buenas actuaciones, y un ritmo frenético es lo que en su conjunto la hacen tan atractiva y adictiva, sin duda es una de las series europeas más originales de lo que llevamos de año.

El colapso está disponible en Filmin completa bajo demanda