En un atardecer pueblerino, de colores grises y tonalidades que recuerdan a Lynch y las miserias que suceden tras las vidas de vecinos comunes y corrientes, tras la imagen de gente que corta el césped en sus casas, un loco suelto que corre por las calles sin rumbo, un hermano que se droga y adolescentes que se prostituyen perdiendo la inocencia e incluso la vida, en un escenario en donde el duelo combate a la par con los deseos de amar, sanar y reconstruir, se teje la historia de un personaje quebrado, en permanente caos y alerta que busca a regañadientes reconciliarse con el mundo. Mare of Easttown, es Kate Winslet, la policía del pueblo, querida y respetada, la que desenreda los entuertos, dramas familiares y robos, mientras debe lidiar con sus propias dificultades y las pesadas cadenas que ha dejado la muerte de uno de sus hijos. Todo parece cotidiano, hasta la noche en que Erin (Cailee Spaeny) es asesinada. La muchacha, cuya relación con Dylan ( Jack Mulhern) el padre de su hijo es para nada cordial, es encontrada a las afueras del pueblo citadino, escenario que susurra cual fantasma del pasado trayendo de regreso la desaparición de otra joven, Katie, perdida en Easttown hace un año. Tras el impacto de los hechos, se le asignará a Mare un compañero, Colin Zabel (Evan Peters), joven detective, vivaz y aplicado. Los miedos y los pecados en la trastienda de la comunidad, deberán enfrentar una lucha cotidiana que involucra desenterrar demonios y culpas.
El director, Craig Zobel, toma las riendas de la historia del guionista y creador Brad Ingelsby, para mostrarnos lo que existe bajo la piel rasguñada de una comunidad como cualquiera, en un armado argumental equilibrado al detalle. El quehacer cotidiano, el día a día y la vida de las familias y vecinos, serán el punto de partida a una serie de eventos, a una trampa que contrasta con las apacibles apariencias. No es necesario repetir lo que tantos han dicho. Sin embargo, cabe reafirmar lo que deambula por Internet: la serie, es lo mejor del año, por el momento. Y ya se subirá al merecido podio al final. Dicho esto, comentaré algunos de los aspectos más interesantes de la misma.
Podemos señalar tres puntos destacables en la construcción de la historia. Toda la narración está basada en el arquetipo clásico del misterio, poniendo de cabeza a investigadores y ciudadanos. Mare of Easttown, es un drama policial, en donde somos testigos de un cruento asesinato. En segundo lugar, nos instala en el proceso evolutivo del duelo. En la manera en que colocamos hielo sobre las heridas, intentando sepultar una culpa sobre otra. Aquello, termina por establecer un círculo vicioso de dolor y conformidad. Esta punta de lanza, se clava en la tierra para señalar el territorio de una nueva travesía : una última estación representada por la despedida, los abrazos apretados alrededor de la casa, el confortable terruño, aquel paraje que amamos y que debemos abandonar en busca de los sueños. El hombre amado, que brinda paz y calor, la hija que anhela un nuevo comienzo, el pequeño que acarrea las debilidades de los adultos y que paga por ellas, el muchacho valiente que deja la vida haciendo lo que ama y le dicta su determinación. Todo acaba en la partida, dejando huellas y moralejas. Estos conceptos, se aparean y germinan para dar a luz a la transformación. El viaje del héroe, en un introspectivo descenso que lo transporta a la senda de la paz definitiva.
El ritmo del guion, los intervalos constantes, las pausas y los diálogos. Todo se cohesiona en favor de la crónica. Sin embargo, no lo hace a través de la típica explotación del crimen y sus aristas. En Mare of Easttown, la muerte es el objeto del que se vale la narración para contarnos la verdad, una trama que bucea en las almas desnudas, en los pecados y en las culpas, en los secretos de los personajes y la manera en que todos se conectan y evolucionan. Aquel relato coral, se vale del carácter particular de sus protagonistas. Rudos, alegres, perdidos o locos, todos nos impactan, cada uno partícipe de un rol determinado.
A pesar de utilizar evidentes estereotipos, las magníficas actuaciones, potencian las funciones y roles de los personajes. Aún estando equivocados o desnudos de moralidad, funcionan como las piezas de un lujoso reloj, siendo grises, dubitativos, capaces de amar de manera bestial, o dispuestos a ocultar la más sórdida de las verdades. La crueldad de la vida se alza frente a ellos. No se trata de la miel que brota de los panales. Es la miel de la tragedia, salpicada de momentos maravillosos y nostálgicos.
La fotografía y los escenarios, con sus paletas otoñales, duras y sobrias, evocan nostalgia. Hay un aire de redención, atardeceres melancólicos y un borboteo desnudo de animales en peligro, en donde planos y pausas se utilizan con sobrias y cuidadas intersecciones. No hay lagunas ni sobreexposición. Se desarrolla con lúcida y fresca narrativa, siendo entretenida, emotiva e irónica, llevándose la dicha y la satisfacción del televidente. Su simbología, determinante y fructífera, nos transporta hacia la matriz en donde madres e hijos permanecen atados a pesar de la desolación, las fracturas y los pecados.
Mare of Easttown, es una bulliciosa metáfora sobre la familia y la cuna, el nido de pájaros que representa la crianza, la entrega desinteresada e incondicional de la madre, con la misión de proteger y procurar la madurez. Es un viaje hacia la aceptación. Despejando piedras en el camino, sus personajes imperfectos, caen y se levantan sobre un suelo arenoso en una doble moralidad, que pretende sostener lo que está por derrumbarse. Desde la cotidiana ironía, lo hogareño y lo afable, hasta la cruda e inevitable visita de la muerte, es la bala que se queda en un árbol impávido, ahogado en el grito sordo de las víctimas. Una lúcida alegoría que nos habla de la inocencia, lo impredecible y catastrófico con una ambigua pureza que sobrecoge y sorprende.
¿Correcto o incorrecto? ¿Moral o inmoral? ¿Con qué vara medimos la decencia y la virtud en los seres humanos? Al final, todo queda subordinado a la experiencia y el aprendizaje. Mark Burton, diácono del pueblo, dirá al finalizar: ¿Porqué irme de aquí? Este es mi hogar. Porque, es eso lo que buscamos: echar raíces y germinar, pasando pruebas y obstáculos. Bienaventurados los imperfectos. Suerte para ellos.
Mare of Easttown está disponible completa bajo demanda en HBO España.
Futura cineasta. Escritora aficionada. Me gusta la ciencia ficción, Lovecraft, Lars Von Trier y Blade Runner, los días de lluvia, dormir y leer.