Portada » Atresmedia

Etiqueta: Atresmedia

‘Toy Boy’: Strippers en la Costa del Sol

'Toy Boy' es el nuevo thriller erótico de Antena 3

Hoy hablaremos de una serie que intenta emular a esas pelis de bailarines exóticos, como Magic Mike y sus buenorros, pero aquí no estamos en Estados Unidos, sino en Marbella y no tenemos a Channing Tatumm, pero sí a Jesús Mosquera. Tenemos bailarines con cuerpos aceitosos y por supuesto, asesinatos, prostitución de lujo y muchos excesos. Estamos hablando de la serie para Antena 3 y  su nueva plataforma Atresmedia player Premium, Toy Boy.

Toy Boy, la serie que nos cuenta la vida de Hugo Beltran (Jesús Mosquera), un stripper (toy boy) recién salido de la cárcel después de 8 años, por el asesinato de Phillip (Virgil Mathet) marido de una de sus clientas-amantes, Marina Medina (Cristina Castaño). Como era de esperar, todo el caso ha estado plagado de errores, por lo que su nueva abogada, Triana Marín (María Pedraza) logra que salga en libertad bajo fianza.

Hugo aprovecha para conectar los hilos que le llevaron a prisión, por ese crimen que él dice no haber cometido. Pero para ello deberá confiar en su joven abogada, que trabaja para un prestigioso bufete, controlado por Carmen, Maria Pujalte. En la serie podemos ver los chanchullos que hace una familia poderosa, en una ciudad como Marbella, algo poco original, tras lo sufrido en los tiempos del alcalde Jesús Gil.

Jesús Mosquera encabeza el reparto de 'Toy Boy', en la que también veremos al hijo de Mar Flores

La serie nos plantea, tras haber visto los dos primeros episodios, un thriller erótico-sexual. En lo positivo del primer episodio, podemos destacar al grupo de bailarines, y sobre todo, ver a Cristina Castaño, haciendo de una mujer muy despreciable, que solo es movida por la ambición y el dinero. La parte mas débil de la serie es la trama previsible, donde el mayor peso de la historia cae en nuestro protagonista con un personaje de pocos matices y que cuesta empatizar con él; quedamos a la espera de ver el resto de la temporada, si no quedará en un simple producto de entretenimiento, con actores de muy buen físico, pero con poca sustancia.

Toy Boy está disponible bajo demanda  y en primicia en Atresplayer Premium y desde el miércoles 25 también en Antena 3.

El ‘prime time’ a las once de la noche no existe

Hace unos días, leyendo este artículo de Borja Terán, Pablo Motos, el amo del prime time (imprescindible como siempre sus reflexiones sobre la industria televisiva), se insistía en que Pablo Motos estaba coleccionando un buen número de minutos de oro. El último, el del jueves 16 de febrero, cuando reunió frente al televisor a 4.181.000 espectadores a las 22.36h, un 21,4% de cuota de pantalla. Teniendo en cuenta que se trata de un programa de access prime time es todo un éxito y, además, la confirmación de que el prime time a las once de la noche no existe, o no debería.

Las grandes cadenas generalistas siguen jugando a un juego peligroso para ellos mismos y para la industria televisiva en general. Ambos gigantes Mediaset y Atresmedia parecen empeñados en comprobar quién acaba antes con el otro. Y en medio estamos nosotros, los espectadores (los de siempre), que poco a poco vamos abandonando el consumo lineal en favor de las plataformas de contenido online o la televisión de pago. No hablemos ya de los adolescentes. Pese a nuestras quejas al respecto, ellos han respondido retrasando aún más el comienzo de programas o series que estamos esperando ver.

La gente en España, aunque haya muchos que no, trabajamos, comemos, dormimos, sentimos y nos gustan algunas series de las que Antena 3 y Telecinco emiten. Cuando empiezan Sé quien eres Pulsaciones yo ya no sé quien soy y mis pulsaciones son tan bajas que no puedo levantar los párpados. Así nos empujan hacia sus plataformas de contenido a ver los episodios sin tanto corte publicitario y cuando nosotros queremos. Es cierto que es una ventaja para nosotros pero no para ellos, porque allí sus productos no serán tan rentables como en la lineal. Imagino que, por tanto, otra solución para rentabilizarlas es venderlas a HBO España, caso de la primera, o al mercado exterior, caso de la segunda.

Hasta que los anunciantes no reaccionen no tenemos nada que hacer. A ellos les convienen que les vean el mayor número de gente posible, y no el mayor porcentaje posible. Sobre todo cuando ese porcentaje son cuatro gatos que probablemente ni estudien ni trabajen, o que no esté en la franja de edad de 18-49 años que en Estados Unidos tanto se busca. Desde nuestra humilde posición, creo que los periodistas, los blogueros y demás analistas televisivos deberíamos dejar de usar el lenguaje que ellos quieran. Llamemos a cada cosa por su nombre y prime time no empieza a las 23h, eso ya es late night. El prime time es cuando el señor Pablo Motos emite su programa. Y él es quien gana.

Refugiados, el futuro llama a la puerta

La nueva serie de atresmedia y BBC

La ficción española sigue dando pasos en la buena dirección y este 2015 se puede considerar como la confirmación definitiva de que las reglas del juego han cambiado y podemos mirar de frente a otros países sin tener que agachar la cabeza. Refugiados es una coproducción con la BBC y se nota su toque pero eso no la hace mejor ni peor, pues se podría haber hecho algo similar sin su ayuda.

Refugiados está rodada en inglés para buscar una mayor proyección internacional, por lo que recomiendo que la veáis en versión original, pues he visto las promos dobladas y no hace justicia a las voces de los actores originales, sobre todo la de Natalia Tena, que no se parece en nada. A pesar del idioma, la serie está ambientada en España y choca un poco ver carteles y matrículas escritos en español. Puestos a rodar en versión original, deberían haber cuidado un poco más este apartado.

La premisa de la nueva serie de laSexta es cuanto menos interesante. Miles de millones de personas viajan desde el futuro para salvarse de una catástrofe que acabará por extinguir la especie humana. Ese masivo éxodo empezará a causar problemas a los habitantes del presente, que se verán completamente desbordados ante la repentina multiplicación de la población mundial, con todo lo que ello conlleva. En los dos primeros episodios hemos conocido a los Cruz, una familia de un pueblo rural que recibe la visita de uno de estos viajeros temporales, al que acogen en su casa.

Protagonista de Refugiados

El piloto me ha dejado un poco frío. La presentación de los personajes me ha parecido un poco lenta, con secuencias innecesarias que han restado tiempo para avanzar un poco más en la historia, introducir nuevos personajes o dar más relevancia a algunos de los que menos tiempo han tenido en pantalla, como Felix, Hugo o el alcalde, que me ha parecido muy interesante, o haber conocido a Mónica antes de ser raptada por la policía del futuro. Dicho esto, cuando Alex ya se identifica, y empezamos a saber un poco más de los refugiados, la trama gana enteros hasta el final del segundo episodio, que termina con una impresionante secuencia repleta de tensión y atmósfera, la misma que no había conseguido transmitir previamente.

Sin embargo, espero muchísimo de los capítulos restantes, sobre todo si empiezan a indagar en el conflicto entre refugiados y habitantes del presente. Será muy interesante ver cómo se explotan temas de xenofobia temporal o discriminación, de los que hasta ahora no hemos visto más que unas pincelada, pero que a buen seguro tendrán una importancia capital a la hora de dar empaque al producto. En el apartado técnico, Refugiados es brillante, desde la fotografía hasta la planificación, más británica de lo que estamos acostumbrados a ver. En cuanto a los actores, todos están muy bien pero Natalia Tena sobresale del resto con un personaje enigmático desde el primer minuto. Ella, la atmósfera y el tono son hasta ahora lo mejor de Refugiados, pues por momentos recuerda a la obra maestra francesa Les Revenants, cuyo principal rasgo distintivo era ese halo misterioso que rezumaba y lo que en realidad la eleva a serie de culto. Captar eso no es sencillo, no lo ha conseguido ni siquiera su remake norteamericano. Por tanto, punto a favor de Ramón Campos y compañía.

En definitiva, salvo el arranque, un tanto lento, Refugiados me parece un producto muy digno con visos de convertirse en una gran serie si explota el enorme potencial temático que tiene más allá de su interesante premisa futurista. Tiene calidad técnica, unos buenos actores y unas posibilidades casi infinitas como para perderla de vista. Desde luego, yo sigo con ella.